Ya pasaron las elecciones nacionales y Mauricio Rosencof hace un paréntesis y se ubica “en el zaguán de diciembre”. En esa aparente calma evoca el boliche de su barrio como el centro social ineludible y a un personaje cuya sabiduría lo acompaña hasta nuestros días, el “Macho” Gutierrez. Sin reclamar nada, pero sin olvidar lo sufrido, alude al procesamiento judicial por violaciones a los derechos humanos de militares que en La Paloma, le cortaron las alas a tantos compañeros. En aquellos años de reclusión y tortura, un alma sensible y una pluma ágil, creaban la ternura en forma de relatos: Leyendas del abuelo de la tarde. Palabras entrelazadas pensando “en la niña de una niña” hasta qe “por fin” las naranjas dejaron de ser verdes.
En este espacio el Ruso acompaña la lectura de la Leyenda del color naranja con la musicalización que Estela Magnone hizo de otros de sus relatos: Coplilla y Naranja de Luz.
Las ilustraciones son de Elbio Ferrario, arquitecto, egresado de Bellas Artes, titiritero, dramaturgo, director de teatro, docente . Ha realizado exposiciones individuales y colectivas. Fue, asimismo, Coordinador del Museo de la Memoria de Montevideo.
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