El 1 de julio la seccional 12 recibió una denuncia de la señora de 86 años y su nieto de 34 años, las personas que viven al lado de la familia de Valeria Ripoll, la candidata a la vicepresidencia por el Partido Nacional, con los cuales mantuvieron un conflicto de convivencia.
Según la denuncia a la que accedió M24, el conflicto denunciado ocurrió entre el 23 de junio y el 30 del mismo mes, pero fue el 1 de julio que se da cuenta a la Policía.
El nieto de la octogenaria se presenta en la dependencia policial para informar que desde enero de este año los vecinos, actualmente indagados, los agredieron con comentarios sobre la supuesta condición de homosexualidad del joven.
A partir de junio son receptores de expresiones tales como "te voy a hacer echar", "ya se te va a terminar", "disfrutá los últimos días", "yo tengo el poder de hacerte echar", frase última realizada por la hermana de Valeria Ripoll "en referencia a que piensa solicitar una medida cautelar".
En la denuncia se indica que esta expresión se relaciona a otra denuncia que realizó sobre la víctima una de las Ripoll por lesiones, lo cual no fue trasladado a la órbita de lo penal "por falta de pruebas" de acuerdo a lo manifestado por el área de Justicia Restaurativa.
También se extendieron las amenazas a su abuela, tras decirle que "iba a morir sola". El joven advierte que cuenta con grabaciones con las amenazas de los indagados, en poder de su abogado y que fueron aportados posteriormente.
Dos días después el nieto se presenta junto a su abogado Darío Madeiro al consultorio jurídico gratuito para ampliar la denuncia penal, ya que manifiesta que los indagados (la hermana de Ripoll y su pareja) le indican que "es psiquiátrico, psicópata que no trabaja, que tendría que haberse recibido hace tiempo, que utiliza su tiempo libre en molestar a las personas", además de amenazarlo con desalojarlo y que mantienen "vínculos con el poder".
Para la víctima estos hechos revisten suma gravedad dado que la hermana de esta es candidata a la vicepresidencia.
El apartamento en el que vive la hermana de Ripoll es una propiedad horizontal de tres departamentos. De esos uno es habitado por la familia Ripoll y el otro es de la abuela de las Ripoll, actualmente internada en una casa de salud. El otro apartamento es de la abuela de 86 años, una de las víctimas.
El 5 de agosto esta vez abuela y nieto denuncian un nuevo "inconveniente" con los indagados el día anterior sobre la medianoche, ocasión en la que concurre el servicio 911 sin que las víctimas hayan hecho el llamado.
En ese momento se encontraban las dos hermanas Ripoll y la pareja de una de ellas quien, según la denuncia, corta un cable que sale de la casa de los denunciantes. Añaden en la denuncia que permanecen "los problemas del agua y la luz" ya que hay un solo medidor de ambos.
En la denuncia ampliada (en base también a registros fílmicos) se indica que Valeria Ripoll le señalaba a la Policía que la mujer de 86 años debía concurrir a la dependencia policial.
A las 48 horas la Policía concurre a la zona para recabar información con los vecinos.