“Es retomar un camino de pensar la seguridad y las estrategias del ministerio en base a los datos”, destacó la senadora.
La bancada del Frente Amplio (FA) recibió ayer al ministro del Interior, Carlos Negro, para conocer detalles sobre los planes de la cartera en torno a la seguridad y convivencia.
Tras el encuentro, la senadora Bettiana Díaz sostuvo que en el actual Ministerio del Interior (MI) hay un “cambio de status” que viene acompañado “no solo” de las políticas que “debería haber implementado” antes en cuanto a la seguridad pública, sino también en lo relacionado al manejo de dinero efectivo y los “pocos” controles que existen al respecto por la “flexibilización” en aduanas y fronteras.
“Es una combinación que a Uruguay le viene haciendo muy mal. Si a eso le sumamos un sistema carcelario que está totalmente reventado de gente, con cárceles que dentro del área metropolitana son tierra de nadie, vemos fenómenos que hasta ahora veíamos por películas”, señaló la senadora en rueda de prensa.
En ese sentido, subrayó que el Plan Nacional de Seguridad que implementará el gobierno en 2026 es una política “basada en evidencia”, lo que es “innovador” en materia de seguridad pública en Uruguay. “Es retomar un camino de pensar la seguridad y las estrategias del Ministerio en base a los datos”, aclaró.
Por su parte, el senador Eduardo Brenta mencionó la incautación de 2.200 kilos de droga realizada el domingo como un indicador de que hay “acciones concretas” que se están llevando a cabo en esa materia. “También hay un Plan Nacional que tiene una cantidad de componentes muy importantes, porque implica intervención de organizaciones sociales, participación de los partidos políticos y diálogo que será analizado y testeado”, agregó.
A su vez, Brenta remarcó que el Plan cuenta con aspectos “novedosos”, relacionados a una “nueva forma a la uruguaya” de encarar los temas de seguridad. “Aspiramos y estamos convencidos de que vamos a lograr la participación de los partidos políticos y el compromiso de estos”, agregó el senador.
El cronograma de trabajo en torno al plan nacional de seguridad incluye un diálogo político y técnico, que se concretará a fines de 2025 e impulsar las medidas concretadas a partir de marzo de 2026.