La directora del museo destacó que lo que se busca es trabajar en “cómo una generación que vivió [la dictadura] puede transmitir a una que no vivió lo que fue el terrorismo de Estado”.
En el marco de las actividades por los 40 años de recuperación democrática en Uruguay, el Museo de la Memoria (MUME), dirigido por Begoña Ojeda, profundiza su tarea educativa y de difusión histórica.
Ojeda explicó al periodista Diego Martini para su columna Desde adentro en Nada que perder que las visitas durante mayo aumentan, ya que cuando los turistas y también los locales asisten a la Marcha del Silencio, “vienen también al Museo de la Memoria”. A esto se suma una mayor concurrencia de centros educativos, tanto en esta época como hacia fin de año.
El museo abre de lunes a sábados de 12:00 a 18:00 horas y ofrece un sistema de autoagenda en línea para coordinar visitas, incluso fuera del horario habitual. Entre las actividades en el marco de los 40 años de democracia, se desarrolló una mesa redonda sobre exilio, cuya intención fue generar un espacio de intercambio entre el grupo de investigación de exilio de la Facultad de Humanidades y estudiantes de formación docente sobre el exilio.
Ojeda detalló que la idea es promover “un intercambio dialógico sobre lo que significó el exilio” en una sala donde se exhiben 29 fotografías que conmemoran las tres décadas de la Marcha del Silencio, curadas por el colectivo Imágenes del Silencio.
En sintonía con el trabajo educativo, el MUME desarrolla iniciativas dirigidas especialmente a las nuevas generaciones. Una de ellas es la presentación del libro Los nietos nos cuentan cómo fue, orientado a adolescentes, que se llevará a cabo el 20 de junio. Ese mismo día, se inaugurará una muestra por los 20 años del Grupo de Investigación en Antropología Forense. En esta línea, Ojeda destacó que lo que se busca es trabajar en “cómo una generación que vivió [la dictadura] puede transmitir a una que no vivió lo que fue el terrorismo de Estado”.
Además, el museo impulsa la creación de una biblioteca de la memoria, que reunirá acervos como el del Penal de Libertad y la colección donada por la familia de Sonia Mosquera. Esta biblioteca será inaugurada el 27 de junio con apoyo de la Junta Departamental de Montevideo.
“Nos están respaldando totalmente las acciones que estamos haciendo”, manifestó Ojeda respecto al vínculo con la Intendencia de Montevideo y contó que, desde su asunción en setiembre de 2024, se ha promovido una gestión participativa con el equipo del museo y organizaciones de la sociedad civil.
Consultada sobre las visitas escolares, Ojeda reconoció que durante la administración anterior hubo casos en los que centros educativos decidieron no asistir al museo por temor a represalias. “Esperemos que eso no suceda en esta administración, que no exista ese temor, que los chiquilines y chiquilinas puedan venir acá y que los directores, docentes, maestros no sientan el temor de alguna represalia con respecto a la visita al museo”, expresó.
El MUME también mantiene vínculos con museos similares de la región, como el Espacio para la Memoria (Ex-ESMA) en Argentina y el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos en Chile.