La inversión estatal será de 4.000 millones de dólares al año pero el desafío es llegar a los 12.000 millones anuales desde el sector público, subrayó el ministro.
El ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, señaló este martes en el almuerzo de la Asociación de Dirigentes del Marketing (ADM) cuáles son los tres principales desafíos de la gestión: la reducción del déficit fiscal del 4,3% de PBI -a lo cual sumó las postergaciones de pagos, por lo tanto llegan al 4,6% de PBI-, acelerar el crecimiento económico y mejorar la distribución del ingreso. En este marco, los lineamientos de la agenda de su cartera serán el aumento de la inversión, la mejora de la competitividad y el fortalecimiento de la matriz de protección social.
Oddone subrayó que Uruguay “necesita” una inversión anual de 20% del PBI, que se dividen en unos 4.000 millones de dólares del sector público, con el desafío de llegar cada año a los 12.000 millones desde el sector privado. En la actualidad, dijo el ministro, el país está “cuatro puntos de PBI por debajo de esa cifra”. Para alcanzar esta cifra son necesarios estímulos porque es la inversión “lo que hará crecer al país”, sostuvo .
Las afirmaciones de Oddone coinciden con su exposición ante los legisladores que integran la Comisión de Hacienda, reunión que se llevó a cabo la semana pasada. En esa oportunidad, priorizó las inversiones públicas en saneamiento y agua potable, así como en infraestructura vial de la zona metropolitana. A esto sumó la creación de una unidad dentro del Ministerio especializada en inversiones.
Con los legisladores, Oddone expresó que Uruguay tiene “una economía sólida en términos de su nivel de crecimiento, de empleo y de inflación, que ha estado descendiendo”, con una situación fiscal desafiante que si no se aborda “tarde o temprano terminan siendo un problema económico”.