Gonzalo Casaravilla afirmó que la política de responsabilidad social de Salto Grande “no es entregar gorritos y camisetas” sino “construir trabajo”.
Entre críticas a la anterior gestión, marcada por denuncias de clientelismo político, asumió como presidente de la delegación uruguaya en la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande (CTM), Gonzalo Casaravilla. En su discurso de asunción, aseguró que no van a usar el organismo binacional “como un trampolín político”, en clara alusión al expresidente Carlos Albisu, que ahora es candidato a la comuna salteña.
“No vamos a hacer falsa responsabilidad social”, afirmó Casaravilla en otro pasaje de su discurso, ante la atenta mirada del presidente Yamandú Orsi, que asistió al acto. Para el nuevo jerarca, esta política “no es entregar gorritos y camisetas, es construir trabajo, capacidades productivas, trabajar con la niñez, con el trabajo de los jóvenes, implementar en Salto Grande el proyecto ‘Yo Estudio y Trabajo’, cosas muy concretas que tienen que ver con la gente y, en particular, con los jóvenes, que son nuestro futuro”, sintetizó.
“No vamos a hacer clientelismo político porque no corresponde”, afirmó, y en este contexto, aseguró que “Uruguay está cambiando culturalmente”. “Tampoco vamos a generar ingresos o ascensos en la empresa sin procesos transparentes y competitivos”, añadió.
En cuanto a políticas de recursos humanos, subrayó que se debe “jerarquizar el ingreso equitativo” en la delegación uruguaya del organismo binacional que gestiona junto a Argentina la represa eléctrica de Salto Grande.
Casaravilla fue presidente de UTE desde 2010 hasta 2020, durante dos gestiones frenteamplistas. Ahora, asume en la CTM luego de un período marcado por la renuncia de Albisu a la presidencia de esta comisión por denuncias de clientelismo.
La denuncia señala el ingreso de forma directa de una treintena de personas, entre ellas ediles y militantes blancos y colorados, en especial de la Lista 404 del Partido Nacional. Durante su gestión, la plantilla de la CTM aumentó de 235 a 260 trabajadores, según los datos que surgen de un pedido de informes de diputados frenteamplistas.
El expresidente Luis Lacalle Pou había respaldado la gestión de Albisu: “cuenta con mi aprecio y mi afecto personal”, había dicho. El pasado domingo, el exmandatario participó en el acto final de Albisu para la campaña por la Intendencia de Salto.