El politólogo Óscar Bottinelli analizó en el programa Nada que perder la recta final de la campaña hacia el balotaje presidencial en Uruguay. Según Bottinelli, las estrategias de los candidatos Álvaro Delgado (Partido Nacional) y Yamandú Orsi (Frente Amplio) presentan características contrastantes que pueden ser clave para captar votantes indecisos.
Respecto a Orsi, Bottinelli destacó su enfoque de estabilidad: “La estrategia de Orsi fue no hacer demasiadas olas. Ha mantenido un discurso fuerte y consistente para un electorado moderado, ese que se sobrepone entre coalición y Frente Amplio”. Además, resaltó que este segmento es crucial, ya que cualquier voto que Orsi logre atraer desde la coalición representa un doble impacto en el resultado: “Cada voto vale doble; lo que le saca a la coalición y suma al Frente Amplio resta uno y suma otro”.
Por otro lado, Bottinelli señaló que la campaña de Delgado enfrenta desafíos de coherencia: “La campaña de Delgado ha entrado en un juego contradictorio. No se puede hablar de buscar gobernabilidad mientras se descalifica a quien se necesita para dialogar. Hay una diferencia entre el tono del debate y este discurso más conciliador de las últimas 48 horas”.
El politólogo también observó que el Frente Amplio no parece haber lanzado mensajes contundentes para captar a votantes de sectores “refractarios”, como aquellos que apoyaron a Gustavo Salle, ni a quienes votaron por el Sí en el referéndum sobre la reforma de la seguridad social: “No da la impresión de que se haya construido un puente sólido hacia estos sectores”.
Bottinelli concluyó que el resultado del balotaje dependerá de cómo cada candidato logre captar a los electores indecisos en este último tramo de la campaña, con especial énfasis en los votantes moderados que oscilan entre ambos bloques.