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Más países toman o se preparan para seguir el camino que eligió Uruguay regulando el mercado de cannabis, señaló secretario de Drogas

Más países toman o se preparan para seguir el camino que eligió Uruguay regulando el mercado de cannabis, señaló secretario de Drogas
Daniel Radío, secretario de Drogas. Foto: Javier Calvelo / Adhocfotos 10 de febrero de 2022

Para que Uruguay y el mundo reduzcan los daños múltiples que generan los mercados ilegales de drogas “el camino es ir terminando con el paradigma prohibicionista”, así como “informar bastante para que la gente sepa” más sobre “algunas informaciones que circulan y hay que desmitificar” a fin de “demostrar en los hechos que el paso dado de regulación del mercado de cannabis es en términos generales positivo”, expresó el secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Daniel Radío en Nada Que Perder de M24.

Radío habló entre otras cosas sobre la legalización y la regulación de las drogas en general, la cocaína en particular y de la política pública uruguaya hacia el cannabis, señalando en este sentido que “hay cosas que se pueden hacer y, por ahora, cosas que no se pueden hacer por motivos políticos, y económicos seguramente, pero sobre todo (…) culturales de base”; y estos últimos implican “una aceptación en términos generales, de la población, del prohibicionismo, que es hegemónico culturalmente en todo el mundo, y la prueba de eso es que cada vez que alguien agita con estos temas se generan reacciones en contrario, ostensiblemente violentas o agresivas”.

“Yo creo que sí, que el camino es ir terminando con el paradigma prohibicionista”, ratificó como política deseable hacia el tema drogas, “lo que no quiere decir que esté proponiendo que mañana estén disponibles todas las drogas para los usuarios, no estoy diciendo eso; creo que hay que dar una batalla cultural en eso y creo que Uruguay lo viene haciendo, no desde que está este secretario general, por cierto: bastante antes lo viene haciendo, y creo que ese es el camino que tenemos que continuar”, anotó.

Como parte de ese camino “tenemos que seguir en el mundo dando esta pelea política en los organismos internacionales vinculados al tema; y en Uruguay lo que tenemos que hacer, primero que nada, es hacer bien lo que nos propusimos hacer, que es la regulación del mercado de cannabis, y que todavía no está bien, todavía tenemos asignaturas pendientes, cosas que me parece que hay que corregir; hay que informar bastante para que la gente sepa, hay algunas informaciones que en general circulan que hay que desmitificarlas y demostrar en los hechos que el paso dado de regulación del mercado de cannabis es en términos generales positivo”, recalcó.

Específicamente respecto de la posibilidad de regular el mercado local de consumo de cocaína continuando la política que nuestro país aplica al de marihuana, Radío puntualizó que “eso no se puede hacer en un solo país, primero eso; y segundo, creo que eso tiene que ir acompañado de políticas educativas y de información a la población; y tercero, entonces creo que lo que se trata es de conformar un bloque regional que avance en ese sentido para implementar eso; sí, estaría de acuerdo, sí”, con legalizar esta droga dura y con regular su mercado consumidor, aunque “no de cocaína” en particular, precisó y explicó el punto: “creo que a todos nosotros nos pasa que nos parece natural la prohibición, y la prohibición es un experimento que hizo la Humanidad, no es natural, no es la consecuencia de las leyes de la Naturaleza que lo que hace mal para la salud esté prohibido, eso no es verdad; lo que me parece que tenemos que ir modificando, con datos, mostrando o poniendo arriba de la mesa, son los resultados malos que ha dado la prohibición, para ir, en un proceso gradual, revirtiendo eso”, indicó.

Si bien actualmente “es algo que no se puede hacer en un solo país, para el mediano plazo soy optimista, porque creo que hoy estamos empezando a abrir el debate y a sacarlo del secreto, sobre todo en Occidente (…); lo que yo sí, no digo, es ¡ah, el día que no haya prohibicionismo resolvimos todos los problemas del uso problemático de drogas! No, no lo digo, que nadie lo diga por mí”, aclaró Radío, y añadió además: “yo no estoy diciendo que el uso de sustancias psicoactivas hoy de acceso ilegalizado sea inocuo, o sea beneficioso para la salud; no, no lo digo y propongo que nadie lo sostenga; en realidad, mayoritariamente, son sustancias perjudiciales para la salud”.

No obstante, “los resultados que hemos tenido están a la vista”, remarcó el jerarca acerca del prohibicionismo, tan reciente que data “del primer cuarto del siglo 20 más o menos; (…) todo eso es consecuencia de este modelo, no de la regulación de ningún mercado; (…) el porcentaje mayoritario, casi absoluto, de los muchachos” dañados por el uso abusivo de drogas “y en particular de algunos casos que son icónicos en Uruguay, son personas que cayeron al uso problemático durante este modelo” prohibicionista, “no durante la regulación de ninguna sustancia; es este modelo el que los ha conducido a esta situación actual” de deterioro en sus vidas “y es este modelo el que tenemos que cambiar: si queremos obtener resultados distintos está bueno que no sigamos haciendo las mismas cosas”, razonó.

Explicó que “el estilo de enfrentar al narcotráfico” en general, tal como “la intensidad” con que se ha hecho y se hace, “ha variado a lo largo y ancho del mundo de distintas maneras y en todos los casos los resultados son los mismos; con mayor o menor agresividad, con mayor o menor dotación de recursos, con más o menos violencia, el resultado es siempre el mismo; y eso pasa porque en realidad el negocio del narcotráfico es muy grande, (…) es un negocio muy lucrativo; por lo tanto, los hacedores de este negocio, que son organizaciones criminales a las que nosotros más o menos inconscientemente les hemos entregado este negocio, son muy poderosas desde el punto de vista económico y por lo tanto cualquier esfuerzo que nosotros podamos hacer vinculado a inversión de recursos, humanos o tecnológicos, ellos lo pueden superar con creces; (…) ¿hasta cuándo vamos a seguir operando en esta lógica?”, dejó planteado como interrogante.

En esa dirección agregó que “al final de la cadena, a la hora de consumir, siempre el consumidor consigue” la droga que busca dado que el mercado  funciona garantizando una oferta que cubre una demanda, “entonces todo lo que hicimos antes fracasó y esto tiene varios problemas: el primero es que el sacrificio que nosotros hacemos en términos económicos y el que hacen las fuerzas de seguridad, en algunos casos poniendo en juego su vida personal, no solo es ineficaz, a pesar del esfuerzo y de la buena voluntad, sino que además es desmoralizante porque termina demostrando que por más que incaute e incaute” droga ilegal el Estado, “no nos conduce a nada”.

En nuestro país, con la legalización general del cannabis y la regulación de su mercado hay “algunos logros”, que para el entrevistado no son mayores porque “hubo algunos errores en la presentación de esta historia”, en razón de los que en su momento “no lo acompañé” al proyecto de ley que creó esta política pública; “yo tenía algunos puntos de vista que eran disidentes con el proyecto, y algunos los sostengo y otros tengo que corregirme, sobre todo en lo que creía iba a ser la repercusión internacional que iba a tener esto; creía que nos iba a ir muy mal en el mundo porque éramos firmantes de las convenciones internacionales y entendía que la reacción del mundo contra Uruguay iba a ser mucho más grande de la que fue; o sea, tengo que reconocer que me equivoqué de palo a palo en eso porque en realidad, al contrario, hoy lo que está pasando es que más países en el mundo están tomando o se preparan para tomar el camino que tomó Uruguay”, resaltó.