“Es importante que terminada la alerta surja una nueva herramienta que permita mantener estos logros y profundizarlos”, sostuvo el director de Protección Social del Mides.
El gobierno mantiene la “alerta de nivel rojo” por frío extremo que declaró el 23 de junio, una “herramienta” que permitió la evacuación obligatoria de personas en situación de calle a través de una respuesta coordinada entre varios ministerios y organismos estatales.
Hasta el domingo 28, fueron identificadas y trasladadas en los operativos 8.128 personas desde la declaratoria de alerta. En Montevideo fueron 2.722 casos, en Maldonado fueron 1.074 y en Colonia 945, en Río Negro 821.
Según datos oficiales recabados por el periodista Lucas Labandera para el informe especial de Nada que perder, la cantidad de internaciones compulsivas hasta el domingo 28 de julio totalizaron 22, ninguno en Montevideo. En cuanto a las detenciones, de las 73 registradas ocurrieron 69 en Montevideo, la mayoría por desacato, agravio o requisitoria.
El director nacional de Protección Social del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Daniel Gerhard, explicó al portal de M24 que la declaración de emergencia permitió el incremento de la capacidad de traslado y atención a las personas en situación de calle. En pocos días fueron atendidas 500 personas más en Montevideo, ejemplificó.
“Es importante que terminada la alerta surja una nueva herramienta que permita mantener estos logros y profundizarlos”, ya que el país se enfrenta a “picos históricos de alojamiento de personas” en situación de calle, apuntó Gerhard.
Por su lado, el secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez, subrayó que la atención a esta situación es un mandato de la sociedad: “no toleramos que compatriotas nuestros estén con estos fríos en la calle, este es un mensaje que la población también recibió”.
La diputada del Frente Amplio (FA) Inés Cortés destacó la iniciativa del gobierno: “Para salir de la situación emergente que nos tocó afrontar se tuvo que desplegar todas las herramientas que teníamos a disposición y, en ese sentido, evaluamos positivamente lo realizado”. La parlamentaria entiende que la fractura social requiere un abordaje con mirada humana y enfocado en cada caso, que incluya oportunidades de acceso a la educación y el trabajo.
Sobre las críticas, Cortés rechazó la opinión “al grito desde una perspectiva política partidaria” ante un “problema crónico”, “es complejo hacer un diagnóstico desde la falta de información y el oportunismo”.