Los precios de la tierra variaron con la Guerra Grande. Previo a la misma la hectárea (Há) valía un peso con 50 centésimos, pero después de la guerra el valor cayó a 0,60 centésimos. Esto posibilitó que los inmigrantes que llegaban a nuestro territorio con algo de capital pudieran adquirir tierras. Desde allí surge una mirada que nos comparte el Ingeniero Agrónomo Ernesto Agazzi en su espacio “Campo y Ciudad” en INFO24.
El rendimiento de la tierra, de los cultivos y la tenencia de la tierra en aquel Uruguay que se encaminaba, tal vez sin saberlo, a un siglo XX de grandes transformaciones.