El futuro presidente del Inisa dijo que buscará "hacer todo lo que hay que hacer y controlar las cosas que haya que controlar”.
Esta semana se anunció que Jaime Saavedra, extitular de la Dirección Nacional de Apoyo al Liberado (Dinali), presidirá el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa). “Me llamó (Alejandro) Pacha Sánchez hace unos días y me confirmó la designación. Estoy muy emocionado y con muchas ganas”, contó en diálogo con Nada que perder.
Según Saavedra, hoy existe “un conjunto de dificultades que son notorias, lugares del sistema que no están funcionando”. En ese sentido, afirmó que su objetivo es trabajar con todas las personas que integran al Inisa para llegar al final de la administración con un instituto del que “la comunidad se sienta orgullosa”.
“Hay que poner un ojo en el camino y otro en el porvenir, como dice la canción de Silvio Rodríguez”, continuó el exdirector de la Dinali. Para eso “lo importante es sentar entre todos las bases de un crecimiento sostenido, que nos permita ir paso a paso”, planteó.
Asimismo, Saavedra dijo que su prioridad es que cada adolescente viva lo que le corresponde vivir a su edad. “Que estudie, que empiece a imaginar su trabajo, que tenga su vida un sentido y felicidad, que pueda perder el tiempo”, ejemplificó. Lograrlo supone aumentar las posibilidades de estudio, mejorar las condiciones de la convivencia y facilitar el acompañamiento de las familias, consideró.
El próximo presidente del Inisa expresó que se reunirá con la Institución Nacional de Derechos Humanos, por la cual fue contactado. Respecto a los informes redactados por el ente, que denuncian las malas condiciones en las que se encuentran muchos de los centros en los que viven los adolescentes, afirmó: “No puede haber ni un solo lugar en que las cosas que pasan sigan pasando” y "ni un solo gurí que por responsabilidad del Estado la pase mal".
En los próximos días, el futuro jerarca también mantendrá un encuentro con las actuales autoridades y con el Sindicato de Trabajadores de INAU e INISA (Suinau). “Habrá que sentarse a conversar con todo el mundo, con mucha humildad y sencillez, pero también con mucha civilidad para hacer todo lo que hay que hacer y controlar las cosas que haya que controlar”, concluyó.
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