El mundo observa una “pérdida de los consensos y respeto a ciertas reglas de juego” por “la imposición de intereses a través de la fuerza por parte de las potencias”, indicó el analista.
El docente e investigador de la Udelar, Diego Hernández Nilson, explicó a La Rosca, por M24, que la tregua pactada en los últimos días entre Israel e Irán dependerá de “la capacidad de Estados Unidos para imponer sus intenciones”, muy vinculado a “la relación entre el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el presidente estadounidense, Donald Trump.
Hernández Nilson explicó que los ataques de Estados Unidos a Irán del 22 de junio fueron una “participación puntual” y, finalizado el operativo, Donald Trump llamó a un alto el fuego. Sin embargo, puntualizó que Netanyahu “está muy atado” a continuar los ataques a los grupos aliados de Irán “para que no caiga su gobierno”.
Para el especialista, “Hay una intención de Israel por cambiar el status quo de la región”. Hernández Nilson recordó que el primer gobierno de Trump acercó a Estados Unidos a las monarquías árabes, movimiento que interrumpió Irán mediante los grupos que apoya, como Hamás y Hezbolá. El objetivo de Israel, dijo el docente, es Irán y sus socios de la región, por esto arrasa Gaza y busca la eliminación de Hamás.
El contexto del conflicto es la transformación del poder hegemónico mundial, cuyos principales protagonistas son las potencias euroasiáticas, Estados Unidos y China, con Medio Oriente como un “área de pasaje”, indicó el docente.
En este marco, Hernández Nilson afirmó que la ONU “pierde poder”. “Estamos en un momento de transición”, dentro del cual “los consensos y el respeto a ciertas reglas de juego se van perdiendo en favor de la imposición de intereses a través de la fuerza por parte de las potencias”, definió.
En cuanto al genocidio sobre Gaza, el docente indicó que dependerá de la presión de la comunidad internacional y de la capacidad de movilización de los ciudadanos en cada país “para que se respete el derecho internacional”. “No puede ser que los fiscales de la Corte Internacional de Paz sean amenazados por Estados Unidos e Israel y los países pequeños que dependemos del derecho internacional enterremos la cabeza como un avestruz en el pozo”, finalizó.