Entre el 20% y el 40% de los niños y niñas pueden egresar del Pereira Rossell pero continúan en el centro de salud “porque no tienen donde ir”.
El Centro Hospitalario Pereira Rossell y el INAU formaron una mesa de trabajo dedicada al seguimiento de los pacientes que residen en el hospital luego de recibir el alta. Entre el 20% y el 40% de los niños y niñas que están hospitalizados se encuentran en esta situación, recordó la periodista Alejandra Couto para su informe en Nada que perder, por M24.
El pediatra adjunto a la dirección general del Centro Hospitalario, Joaquín Mauvezín, explicó que el trabajo conjunto para identificar cada caso permitió una reducción en los tiempos de espera que presentaba el INAU. Como próxima meta señaló “la formación de un dispositivo puente que va a incluir un centro donde los niños pasen el tiempo que deban pasar de la mejor forma, en una lógica de desinstitucionalización”.
Desde el INAU, el vicepresidente de la institución, Mauricio Fuentes, sostuvo que existen cupos para atender a quienes egresan del Hospital con alta médica. “No hay antecedentes de un trabajo que permita abordar tempranamente el egreso”, indicó el jerarca. La mesa permitirá la instalación de un equipo que genere de forma anticipada un conjunto de alternativas, como un posible “centro de breve estadía”, que no impliquen la institucionalización en un centro de 24 horas, ejemplificó.
Además del derecho a tener un lugar para vivir, los niños y niñas que aún residen en el Pereira Rossell conviven con otros pares que padecen enfermedades, un tópico que preocupa frente a los próximos meses de frío invernal.
"Cerebro parental": por qué es fundamental la construcción del vínculo entre bebés y padres adoptivos en los primeros meses de vida
La Academia Nacional de Medicina impulsó una exposición encabezada por el pediatra y profesor titular de neonatología de la Udelar, José Luis Díaz Roselló, en la cual informó sobre el incremento en la cantidad de niños con riesgo de abandono en el Pereira Rossell desde 2021. Son hijos de padres que manifiestan “incapacidad intelectual, psiquiátrica o debilidad social” que le impide asumir su responsabilidad.
Díaz Roselló puntualizó sobre la relación del lactante con su madre durante los primeros días de vida, relevante tanto para los hijos o hijas como para los adultos. En base a estudios científicos se determinó que la crianza “le cambia el cerebro” a los adultos: “Ese niño provoca en la cabeza de sus padres lo que ningún otro niño genera”. Esto se denomina “cerebro parental”, capaz de generar una “enorme recompensa”. “Por eso es importante que a los niños se los entreguen rápidamente a los padres que lo van a criar toda la vida”.
En el caso de la adopción de bebés, “cualquier niño que se demore en entregar a una familia pierde oportunidades de tener adultos disponibles para que lo críen toda la vida”.