La exjueza ya integró el directorio de la institución en el período de conformación de los equipos de investigación, recordó el integrante de la Asociación Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos.
El representante de la Asociación Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos Ignacio Errandonea dialogó con Nada que perder sobre la propuesta formal que presentaron para que la exjueza Mariana Mota ocupe el cargo que dejó vacante Wilder Tayler en el directorio de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH). Es “la persona más idónea”, afirmó.
Propusieron a Mota debido a “sus características personales, y su compromiso” con la búsqueda de los desaparecidos, explicó. Recordó que la exjueza ya integró el directorio de la institución en el período de conformación de los equipos de investigación trabajando en conjunto con Tayler. De acuerdo con Errandonea, Mota "conoce del tema y sabe investigar”, porque fue jueza en múltiples causas vinculadas a delitos cometidos durante la última dictadura cívico-militar.
Errandonea valoró de forma positiva la gestión de Tayler, quien co-lideró la búsqueda de los desaparecidos en la INDDHH desde el inicio. Resaltó que “se ha podido avanzar”, pero con limitaciones, “en tanto que no hay información oficial, que tendrían que proporcionar las Fuerzas Armadas”. “En la medida que no hay información, se está trabajando un poco a ciegas”, aún así “se pudo avanzar” y “trabajar correctamente”, destacó.
“Lo que se necesita en la búsqueda es continuidad”, es decir, “que todo lo que se fue emprendiendo y se fue desarrollando, seguir haciéndolo”, reflexionó. Un nuevo director “que no conozca de la temática se tiene que poner al tanto, tiene que ver qué se está haciendo”, argumentó.
Por otro lado Errandonea se refirió a las “medidas concretas” adoptadas por el gobierno actual, como continuar con la digitalización de los archivos de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia (DNII) de la policía o implementar el bloqueo del cobro de jubilaciones de los militares que están fugados de la justicia, en el exterior. Son decisiones “que van en una buena dirección, todavía es muy pronto, pero esperamos que se tomen soluciones más profundas que permitan avanzar”, concluyó.
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