En su primer discurso como Papa, Robert Prevost lanzó un llamado a la paz, agradeció a Francisco y a los cardenales, y envió un mensaje en español a Chiclayo, la diócesis donde fue misionero en Perú.
El estadounidense Robert Prevost ofreció su primer discurso desde el Vaticano tras asumir como papa León XIV, con un mensaje centrado en la paz, el amor de Dios y el compromiso misionero.
Ante casi 100.000 personas, Prevost habló en italiano y, hacia el final, se dirigió en español a su antigua diócesis en Chiclayo, Perú, y agradeció al pueblo que lo acompañó como obispo. También expresó su gratitud al Papa Francisco y a los cardenales que lo eligieron como sucesor de Pedro.
“Quisiera que este saludo de paz entrara en su corazón, que llegara a sus familias, a todas las personas dondequiera que estén, a todos los pueblos, a toda la tierra, la paz sea con ustedes”, comenzó diciendo el nuevo papa. En ese sentido, afirmó que "la paz de Cristo resucitado", es una "paz desarmada y una paz desarmante", humilde y perseverante, que viene del Dios que "ama a todos incondicionalmente".
En su discurso, el Prevost instó a “construir puentes a través del diálogo, del encuentro", para que la humanidad sea "un solo pueblo siempre en paz”.
Prevost expresó su gratitud hacia el Papa Francisco y a los cardenales que lo eligieron, a la vez que subrayó el carácter misionero y sinodal de la Iglesia. “Gracias al papa Francisco. Quiero también agradecer a todos mis hermanos cardenales que me han elegido para ser el sucesor de Pedro y caminar junto a ustedes como vida de la Iglesia, buscando siempre la paz, la justicia, buscando siempre trabajar como hombres y mujeres fieles a Jesucristo sin miedo a anunciar el Evangelio, a ser misioneros”.
Su discurso fue en italiano, pero se permitió hablar en español para enviar un saludo “en modo particular” a su “querida diócesis de Chiclayo, en el Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo”.