Las medidas cautelares judiciales, su cumplimiento y control, así como el papel del INAU, son fundamentales para evitar riesgos sobre la infancia y adolescencia, dijo Echetto.
La abogada especializada en temas de género y derechos humanos, María de la Paz Echetto, señaló su “impotencia” por el trágico final de Luna, la niña de 13 años asesinada en Maldonado por su padre, un excoronel del Ejército.
“Hace años que se está trabajando para que estos temas puedan estar sobre la mesa; sin embargo, se siguen dando más de lo que pensamos o esperamos”, expresó la especialista en diálogo con La Rosca, por M24.
¿Se podría haber evitado? Para Echetto, hay “violencias tan extremas” que son difíciles de evitar. Sin embargo, subrayó los “roles principales” que tienen las entidades estatales y judiciales para “hacer todo lo posible para evitar riesgos tan graves”. Por ejemplo, citó las medidas cautelares y el control de su cumplimiento, así como el rol del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) como “rector de las políticas públicas”.
Desde el punto de vista judicial, Echetto señaló que “siempre va a quedar la duda, en situaciones donde intervienen infancias y adolescencias, sobre la capacidad para poder decidir si (los niños, niñas y adolescentes) pueden volver a tener contacto con una persona que les maltrata de una forma tan fuerte”.
La abogada preguntó si “hubo una instancia de reparación del daño hacia ella”, o si “la persona agresora tuvo una o varias instancias para reflexionar sobre su comportamiento, de entender que sus prácticas eran violentas”, o si “la niña va a tener un entorno que la apoye y la contenga en el encuentro con una persona que la agredió”. Su posición es favorable a ejercer “un control más” sobre quien ejerce la violencia. Para la especialista, “el interés superior del niño o niña debe primar” en cualquier proceso con antecedentes y riesgos de violencia familiar. Rememoró el contexto particular del nacimiento de Luna, que “ya se da en el marco de una situación de violencia”.
Por otra parte, comprende que el sistema judicial uruguayo es “adultocéntrico”. “Si ya lo tomamos desde esa perspectiva, las resoluciones que puedan ir surgiendo probablemente sean equivocadas”.
Echetto indicó que los actores judiciales cuentan con “herramientas” sobre violencia de género, como “una guía bastante básica”. Pero “como no se tiene una perspectiva global ni los juzgados integrales establecidos por la ley 19.580”, cada actor judicial lo aplica de forma personal o no.