Los principales dirigentes blancos de Lavalleja participaron de una reunión en el Hotel Verdún de Minas para presionar a Miriam Soria, indicó el dirigente colorado Luis Carrese.
El edil del Partido Colorado, Luis Carrese, aseguró que la integrante de la Junta Electoral, Miriam Soria, fue presionada durante el escrutinio secundario por la exintendenta Adriana Peña y Mario García, quien fue candidato a la reelección a la comuna lavallejina, junto a otros once dirigentes blancos del departamento. “Me causa indignación ver los videos de Adriana Peña desmarcándose cuando era parte de eso”, expresó Carrese en una entrevista con el programa Campo Serrano, 1580 AM Emisora del Este.
El hecho ocurrió en el Hotel Verdún de Minas, búnker del Partido Nacional en estos comicios, relató el colorado. Sobre la reunión, Carrese dijo: "vamos a ser bien claros, allí también estaba (el exintendente) Mario García, (la directora de Jurídica, Laura) Nahabetián, (la expresidenta de la Junta Departamental) María Noel Pereira Saravia, el director de prensa Fernando Blanco". “En 26 años en política jamás había estado en una situación donde se tratara de quebrar la voluntad soberana”, aseguró.
"Yo lamento esa forma de conducirse que tiene el Partido Nacional, de ir a buscar a una representante del Partido Colorado como si fuera el peón de la estancia y el patrón le pega tres gritos", criticó Carrese. "Miriam Soria dejó la dignidad bien alta en una reunión en la que se manejó delante de 13 personas metiéndole presión, a nosotros nos llena de orgullo", sintetizó el dirigente colorado sobre la posición de Soria durante el encuentro en el Hotel Verdún.
Carrese relató que Soria lo llamó en la jornada que comenzó el escrutinio secundario, el martes posterior a las elecciones, porque la vocal de la Junta Electoral recibió “exabruptos” y “chicanas que no correspondían de funcionarios de la Corte Electoral”, como por ejemplo: “mirá que vos entraste en la época de Lacalle”. También recibió llamadas telefónicas, “mensajes de Adriana Peña” y de dirigentes que le daban “lineamientos” para evitar el conteo de votos en una urna, agregó el edil.
El dirigente colorado identificó puntualmente al presidente de la Junta Departamental, Joaquín Hernández, a quien le dijo: “no le pongas más presión a Miriam y las próximas comunicaciones son solamente delante de mí”. Sobre Hernández, aseguró que “si la justicia llega a actuar de oficio no será el único nombre, pero seguro va a ser el más reiterado”. Para Carrese, hubo “presiones para cambiar el veredicto de una urna”, por el cual “capaz que la Justicia entiende que esto raya el delito electoral o es un tema laudado y directamente no se mete”, pero subrayó que el comunicado del Partido Colorado de esta semana fue para poner en conocimiento “que este no es el accionar normal” ni la “forma de conducirse”.
Esta denuncia se suma a la declaración del presidente de la Junta Electoral, Miguel Azurica. “La presión, vamos a decir bien clarito, del Partido Nacional, nunca fui presionado por el Partido Colorado ni por el Frente Amplio”, indicó en entrevista con Federal FM de Lavalleja. No señaló a Adriana Peña ni a Mario García, pero sí a dirigentes de las listas 51, 22 y 58, así como a un director de la Intendencia como las personas que lo presionaron y amenazaron con golpes. "Estoy acostumbrado a la presión, pero esto fue totalmente distinto", concluyó.