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Alto al fuego

Donald Trump quiere “la paz por la fuerza”, aseguró analista internacional

Manifestación en Nueva York contra la guerra en Oriente Medio. AFP

Para Leo Harari, los verdaderos desafíos -como el cambio climático, las migraciones o las pandemias- están siendo eclipsados por conflictos “tribales”.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes un acuerdo de alto el fuego entre Irán e Israel, que comenzaría este martes. El anuncio representa, en teoría, el fin de una escalada bélica que incluyó un ataque preventivo israelí, una ofensiva estadounidense no consultada con el Congreso y una respuesta iraní con misiles sobre una base norteamericana en Catar.

Según el analista internacional Leo Harari, este conflicto refleja un giro en el orden global. “Se está imponiendo cada vez con mayor presencia una nueva visión del mundo”, explicó en Nada que perder. Harari señaló que esta lógica abandona el marco posterior a la Segunda Guerra Mundial, basado en derechos humanos, organismos multilaterales y soluciones negociadas, puesto que lo que Trump propone es “la paz por la fuerza”.

Para Harari, este accionar responde más a una necesidad política interna que a una estrategia internacional consistente. “Trump lo único que él quiere es que digan, 'Qué bien, bravo, resolviste algo'. Pase lo que pase después”, afirmó el analista, quien consideró que el presidente estadounidense busca mostrar un triunfo en la cumbre de la OTAN, a la que llega “desde una situación política muy mala”.

Respecto a Israel, Harari destacó una estrategia de largo plazo. “La Constitución de Irán prevé la destrucción del Estado de Israel”, indicó, lo que ha sido utilizado por Netanyahu para justificar sus acciones. 

A pesar del alto el fuego, Harari manifestó que ve pocas perspectivas de resolución real y, en tal sentido, sentenció: “Esto así como está no tiene solución”. Para el analista, “las bombas no acercan la democracia” y subrayó que sin una solución al conflicto palestino “no hay solución en el Medio Oriente”.

También advirtió sobre un escenario más amplio de deterioro global: “Se desarmó la gobernanza internacional”, sostuvo e indicó que los verdaderos desafíos —como el cambio climático, las migraciones o las pandemias— están siendo eclipsados por conflictos “tribales”.

En este contexto, China aparece como un actor en ascenso y Harari opinó que para el país asiático “esto es una fiesta”, debido a que mientras Estados Unidos se retira del sistema internacional, China ocupa los espacios vacíos con una estrategia de largo plazo.

El alto el fuego puede marcar una pausa, pero no un cierre. “Lo único que se hace es ganar un poco de tiempo hasta el próximo conflicto”, apuntó Harari.