El candidato a la presidencia por el Partido Nacional, Álvaro Delgado, realizó su acto final de campaña este miércoles 20 de noviembre en el Obelisco de Montevideo, acompañado por los principales líderes de la coalición multicolor, diputados, senadores y hasta intendentes. Todos subidos al escenario.
Este evento marcó el cierre conjunto de los partidos que integran la coalición oficialista: Nacional, Colorado, Cabildo Abierto, Partido Independiente y el reciente sumado Partido Constitucional Ambientalista que no cuenta con representación parlamentaria para el próximo período legislativo.
El primer orador fue Eduardo Lust, excandidato del Partido Constitucional Ambientalista, quien dijo que el Frente Amplio simpatiza con regímenes no democráticos como el de Venezuela y en ese sentido indicó que los países socialistas están estancados.
También dijo que en el FA son simpatizantes del Foro de San Pablo y de la Agenda 2030, "un proyecto de burócratas que quiere que los países desaparezcan y el Estado nación también".
Asimismo, insistió con que el FA actual no es el que gobernó en el pasado y que ahora están en manos del MLN y del Partido Comunista que cuando gobernaron estaban "enchalecados" porque el sistema no les permitió "salirse".
Por su parte, el excandidato del Partido Independiente, Pablo Mieres, recordó que el país que recibieron estaba estacando económicamente, con incremento de delitos y problemas en la enseñanza. En ese marco, sostuvo que a partir del 2020 en adelante el país mejoró respecto al de cinco años atrás.
"Todos los días encontramos nuevos datos que demuestran que el Uruguay de hoy tiene 90 mil puestos de trabajo más que hace cinco años, un nivel de formalidad en el empleo de 4 puntos más, un salario real de dos puntos y medio por encima del 2019, con una reforma educativa en marcha, con una reforma de la seguridad social realizada", aseguró.
Tras este breve detalle de avances, que a su juicio tuvo el gobierno de Luis Lacalle Pou, volvió a traer al FA sobre el escenario. "Recibimos un no a todo. Una incapacidad absoluta de reconocer absolutamente nada", indicó.
Resaltó el perfil de Delgado por haber estado ejerciendo la Secretaría de Presidencia durante cuatro años donde "conoció todas las áreas de un gobierno y no una comarca", esto último en alusión a la Intendencia de Canelones.
A su turno, el excandidato de Cabildo Abierto, Guido Manini, afirmó que el domingo 24 hay dos opciones: "la opción de la coalición republicana ofrece mejorar en cada uno de esos temas que afectan la vida de los uruguayos", en relación a la salud, la educación, el trabajo, la seguridad pública y la vivienda.
Luego expresó que el domingo no se le puede dar el voto a quienes, a su entender, son los responsables por la actual situación de inseguridad que vive el país, así como tampoco conceder el sufragio para que gobiernen en la enseñanza los sindicatos, "quienes se creen el ombligo de la educación nacional".
"El domingo los uruguayos tenemos en nuestras manos la posibilidad de permitirle al sistema político seguir trabajando para mejorar en estos temas o regresar a quienes son parte del problema y no la solución", sintetizó.
Tras el discurso de Manini, que no verbalizó al FA, pero lo aludió casi sistemáticamente, habló el excandidato del Partido Colorado, Andrés Ojeda, quien no reparó en referirse constantemente a la coalición de izquierda.
"Tengo bien claro lo que quiero para el Uruguay del futuro, pero también tengo bien claro lo que no quiero. Tengo bien claro que no quiero volver al pasado. No quiero tener un presidente que no sabe si va a subir o no los impuestos. Tengo algo bien claro, si algo el Frente no representa es el cambio seguro. Son la inseguridad absoluta", discurrió en sus primera palabras.
Y siguió: "No quiero un presidente que no es capaz de responderle a un periodista tres preguntas porque no estaba pautada".
Después enfatizó que "la fuerza política más importante del país es la coalición republicana, que le ganó al FA el 27 de octubre y al parecer como viene la tendencia le va a volver a ganar el 24 de noviembre".
"Subestimaron a la coalición en esta elección. Hay un hecho inédito e histórico. Hay un spot de televisión espalda con espalda del candidato del Partido Colorado y el candidato del Partido Nacional que hoy es candidato de la coalición republicana", dijo.
La fórmula
La candidata a vice del Partido Nacional, Valeria Ripoll, dijo que en esta campaña se dio la cara, fue de ideas y no se atacó a nadie.
"No hemos ido a buscar a nadie a cambio de nada. Invitamos a la gente que se sume por convicción a nuestro proyecto. Tenemos para ofrecerle a cada votante que no importa qué opción votó el 27 de octubre. Los invitamos a que si hoy Uruguay es mejor país que en el 2019, imagínense qué Uruguay les vamos a dejar en 2030 con otro gobierno de la coalición", aseguró.
Además, dijo que la gente no quiere grietas, sino un país que se construya en unidad "y eso es solamente posible con un gobierno de la coalición y con Álvaro Delgado siendo el próximo presidente de la República".
"Está claro que las encuestas dan que la elección va a ser pareja y que quizá nos acostemos un poco más tarde. Con la señal que la gente nos dio de unidad, cuando se necesita un presidente que tenga la capacidad de buscar acuerdos en pos de la unidad del país, pero si del otro lado encuentra un palo en la rueda, una pared, tiene la garantía de los uruguayos que va a tomar las decisiones necesarias para que Uruguay siga avanzando sin importar cuántas piedras nos tiren del otro lado", prosiguió.
Para Ripoll es claro que se va a ir a buscar acuerdos, en caso de que Delgado sea el próximo presidente, "que se ha demostrado durante toda la campaña".
Cerró el acto final el candidato blanco. Delgado dijo que la coalición no representa partidos sino proyectos y que el mensaje del resultado de la elección del pasado domingo 27 de octubre fue el de juntarse "para ganar y para gobernar".
Criticó que no haya habido más debates con el candidato frenteamplista y también cuestionó el formato del debate. "No sirvió", sentenció.
Asimismo, opinó que en 2019 la ciudadanía resolvió cambiar porque "había un Frente Amplio de mano de yeso y agotó su modelo".
"En muchos temas fracasó. Hubo cosas para rescatar, claro que sí, pero fracasó en lo más importante, en generarle esperanza a la gente. La gente cambió. Nosotros en aquel momento con Luis (Lacalle Pou) entendimos el mensaje que no era cambiar una mitad por la otra. Ahora también entendemos el mensaje", puntualizó.
Al respecto, aseguró que "no solo que la coalición es el proyecto político de Uruguay más votado por cuarta vez, sino que el mensaje es que nadie tiene mayorías con lo cual todos tenemos que asumir de cambiar ese chip".
Para Delgado con este escenario parlamentario "vamos camino a la unidad nacional".
"Vamos a abrir los brazos para llegar a los acuerdos necesarios. Y para eso tenemos claro qué hay que hacer. Más que buscar mayorías, buscar acuerdos. Si del Frente Amplio no hay voluntad de cambiar el chip de la confrontación por la cooperación, uruguayos quédense tranquilos que vamos a gobernar igual", advirtió.
A esta declaración sumó otra posteriormente: "me han visto en estos días ir a la búsqueda de acuerdos, son necesarias".
Sin embargo, aclaró que "tampoco vamos a negociar sin reconocernos a nosotros mismos, porque hoy es mucho más importante tener el Poder Ejecutivo y la Presidencia ya que nadie tiene mayoría, porque los acuerdos dependen de la capacidad del presidente de la República".