El gobierno llegó a un acuerdo con el consorcio Aguas de Montevideo para dejar sin efecto la construcción del proyecto Neptuno, y en su lugar llevar adelante otras obras que garanticen el suministro de agua potable en el área metropolitana.
En su lugar, se va a construir una planta potabilizadora de agua en la cuenca del Santa Lucía, en las inmediaciones de Aguas Corrientes, en Canelones. Por otro lado, también se va a construir una reserva de agua bruta en la zona de Solís Chico, Canelones, junto con una pequeña planta potabilizadora.
De esta forma, se da marcha atrás al proyecto Neptuno, que generaba cuestionamientos desde la academia y organizaciones sociales por sus implicancias ambientales. La entrevista en Nada que perder con Bernardo Zabaleta, doctor en Ciencias Ambientales.