De la tierra a la mesa, diferentes organismos estatales participan del proceso de inspección de la producción de alimentos para garantizar su calidad y sustentabilidad.
La Guía de buenas prácticas agrícolas para la producción de frutas y hortalizas frescas en Uruguay es un documento aprobado por el Ministerio de Ganadería en 2014 que enmarca la producción con buenas prácticas ambientales y la sostenibilidad social y económica del rubro. El informe del periodista Lucas Labandera para Nada que perder
La Intendencia de Montevideo cuenta con la mayor recolección de información sobre residuos de plaguicidas en frutas y hortalizas en la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM). La encargada del Servicio de Regulación Alimentaria capitalino, Carolina Paroli, explicó a M24 que estos datos sirvieron para imponer sus regulaciones propias, incluso más estrictas que a nivel nacional, como los temas vinculados a los transgénicos.
El Registro Único Nacional de Alimentos creado en 2023 unificó los procedimientos bromatológicos para la habilitación de locales, productos y vehículos, lo que permite a los propietarios de empresas recurrir a un solo trámite para trabajar en todo el país. El coordinador del Registro, Marcelo Amado, aseguró que los alimentos registrados en este sistema pueden circular en todo el país.
Los controles incluyen todas las etapas de la elaboración de alimentos, desde la planta elaboradora hasta el lugar de venta. Más de 120 técnicos de todas las intendencias integran una herramienta “importante en materia de control”, sostuvo Amado. Cada alimento tiene una reglamentación específica sobre aditivos y azúcares, por ejemplo. Como los elaboradores de alimentos deben especificar todos los ingredientes, Amado destacó al sistema como un instrumento importante para las políticas nacionales, una cuestión que se dialoga con el Ministerio de Salud Pública y el Instituto Nacional de Alimentación.
En cuanto a los controles sobre la carne, el integrante del Instituto Nacional de Carnes, José Manuel Mesa, aseguró que el tiempo de espera luego de utilizar determinados productos veterinarios en animales es fundamental para el buen manejo de este alimento.
El uso de agroquímicos para la producción de alimentos
El ingeniero agrónomo Gonzalo Leiva explicó a M24 que varios productos nocivos para la salud en animales y humanos fueron utilizados durante décadas en sistemas de producción convencionales. Sobre los utilizados en la actualidad, dijo que “es complicado saber qué tan agresivos son los productos que se utilizan hoy y cuánto respetan los productores los tiempos de espera”.
Varios químicos cuentan con habilitación para su uso extensivo y las importadoras no se toman el trabajo para hacer el registro en horticultura y fruticultura, dos sectores que también utilizan estos productos sin conocer los efectos concretos en la producción y el consumo.
Por otro lado, la producción orgánica “tampoco es tan inocua”, indicó el ingeniero agrónomo. El uso de fertilizantes naturales también es capaz de generar excesos de nitrógeno u otros nutrientes que aceleren procesos de eutrofización que produzcan cianobacterias.
En cuanto a la seguridad laboral, un trabajo académico de la Universidad de la República analiza si existe una relación entre la exposición a los agroquímicos con diversos problemas de salud, como reproductivos, malformaciones y enfermedades estacionales. En algunos casos, los trabajadores encontraron dificultades para hacer las denuncias.
La Guía de buenas prácticas agrícolas cuenta con una sección específica sobre los derechos de los trabajadores del sector, que incluye la obligación de los empleadores a suministrar los implementos para desempeñar la labor con seguridad y de informar sobre los riesgos en el manejo de ciertos productos, la capacitación, exámenes anuales de salud y demás.