"Las personas merecen gozar de sus derechos humanos porque son seres humanos, porque hay una dignidad humana", aseguró la jerarca.
La docente y activista Collette Spinetti asumió como secretaria de Derechos Humanos (DDHH) en este nuevo período de gobierno y se propuso reactivar una institución que, según dijo en Nada que perder, encontró "absolutamente detenida" y sin una actitud proactiva en la defensa y promoción de los derechos fundamentales.
“No había diálogo con la sociedad civil, no había diálogo interinstitucional, no había diálogo con organizaciones como ONU, como OEA, que para nosotros son fundamentales”, puntualizó y agregó que la anterior administración se limitaba a cumplir ciertos lineamientos, pero no hacía propuestas.
En la entrevista de este miércoles, Spinetti enfatizó que su gestión pondrá en el centro la dignidad humana y la equidad e indicó que uno de sus principales desafíos será atender a poblaciones en situación de vulnerabilidad, como personas privadas de libertad, mujeres precarizadas, infancias, la comunidad LGBTI, entre otras. "Las personas merecen gozar de sus derechos humanos porque son seres humanos, porque hay una dignidad humana", aseguró.
El plan estratégico de la secretaría incluirá aspectos como la formulación, ejecución y evaluación de políticas públicas con enfoque en DDHH; la mejora de las prácticas institucionales acordes al enfoque y a la normativa de DDHH; la consolidación de Uruguay en espacios internacionales; la coordinación con el Instituto Nacional de las Mujeres y organismos del Estado y la sociedad civil, entre otros.
Spinetti también planteó la preocupación ante el avance de discursos antiderechos en la región y su impacto en Uruguay, particularmente entre los jóvenes. "A mí me me preocupa cómo todo eso va permeando [...] y me preocupa que llegue la política”, reconoció y aclaró que “no es una cuestión de discriminación”, sino de “conciencia social”.
La jerarca es la primera mujer trans designada para un cargo ejecutivo. Consultada acerca de la valoración que hace de ello, advirtió que el puesto no se lo ofrecieron por el hecho de ser una mujer trans, sino porque hay una formación y militancia política detrás.
En este sentido, indicó: “Creo que es un gran mensaje que el gobierno de izquierda, encabezado por Yamandú Orsi, le está diciendo al mundo: ‘acá no pasarán’” y recalcó: “en un mundo en que se están cuestionando los DDHH, que hay un retroceso, que pongas a una mujer, a una construcción femenina y trans, es como decir: ‘acá no pasarán’”.