"Algunas de las normas que habían causado polémica en Presupuesto van a ser mejoradas", sostuvo abogado especialista

Leonardo Costa valoró la convocatoria de Oddone, porque generalmente los ministros de Economía "se cierran" y son los tributaristas quienes deben ir al Parlamento.
Con foco en el crecimiento económico, el Presupuesto quinquenal del gobierno de Yamandú Orsi plantea algunos cambios tributarios, diseñados para que el país cumpla con estándares internacionales y en pos de proteger la competitividad del comercio local frente a las plataformas digitales extranjeras, como Temu. Además, propone la autorización a la DGI a levantar el secreto bancario sin intervención judicial y la adopción del Impuesto Mínimo Global.
El abogado Leonardo Costa, en entrevista con Nada que Perder, contó que el ministro de Economía, Gabriel Oddone, convocó días atrás a distintos abogados tributaristas del país y que, en la reunión, les comentó que "alguna de las normas incluidas en el Presupuesto que habían causado polémica van a ser mejoradas". "Muchas de las cosas que habían causado mayor rispidez, probablemente tengan modificaciones que eliminen parte de la polémica", aseguró.
En ese sentido, Costa valoró la convocatoria de Oddone y reflexionó que "no es común" ese tipo de reuniones, porque generalmente los ministros de Economía "se cierran" y son los tributaristas quienes deben ir al Parlamento, convocados por los legisladores, para buscar modificaciones a las normas.
"Hay una propuesta modificativa para la medida del levantamiento del secreto bancario, que, para los residentes uruguayos, la DGI tenga el mismo mecanismo que hay cuando existen tratados”, adelantó el abogado, refiriéndose a los acuerdos entre países que permite el intercambio de información financiera.
Costa explicó que la idea del ministro y su equipo es que, si a los residentes uruguayos “se los trata de una determinada manera” cuando tienen incrementos patrimoniales en Uruguay, ocurra lo mismo si los tienen en el exterior. “Y si a los no residentes se los trata de determinada manera respecto al secreto bancario, debería tratarse igual a los residentes”, puntualizó.
Sobre el Impuesto Mínimo Global, Costa dijo que Oddone hace hincapié en el tema porque “ahí están parte de los ingresos que él espera” para poder bajar el déficit fiscal, que actualmente ronda en el 4,2%. “La crítica que ha tenido es que quizá Uruguay se estaba apurando a lo que eran los tiempos de la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos], que hoy en día no tiene el prestigio que solía tener”, complementó el entrevistado.
El abogado añadió que autoridades del MEF están en diálogo con la OCDE, discutiendo modificaciones para establecer que solo se va a cobrar ese impuesto en la medida que la multinacional que esté en Uruguay pueda, una vez tributado ese impuesto en el país, obtener créditos fiscales en el exterior. “Esto es, que no pague dos veces o que no pague en Uruguay si es que en algún lado también la van a hacer pagar”, explicó.
Por último, Costa sostuvo que, con este gravamen, el MEF busca evitar que se afecte la neutralidad y que “Uruguay termine gravando algo que no grava nadie, por decirlo coloquialmente, lo que no implica un problema jurídico”. “Si se logra esto, el impuesto mejora sustancialmente”, concluyó.